Estas no son las noticias pero vamos a entrar en directo en 30 segundos. No hay tiempo para maquillar tus ojeras de la noche anterior ni para despedirse de los conductores del programa anterior. Estás simplemente tú y esa cámara y un tío que graba todo desde detrás de la cámara y supongo que un montón de gente al otro lado esperando que acabe esa cabecera y salga tu cara y las noticias, aunque esto no son las noticias.
Salimos en 30 segundos al aire y tú tienes que sonreír aunque no quieras. Pero tampoco fuerces tanto la sonrisa, hombre, que parezca natural, que parezca que tu también vas drogado como el resto. Te quedan 30 segundos asi que ya puedes pensar en el país de las golosinas o en lo cachonda que está tu compañera de informativo y olvidarte de toda la mierda que llevas escribiendo toda la noche. Entramos en 30 segundos y tú no tienes compañera.
Es irremplazable, lo sé, pero tienes que reemplazarla, me lo repetía el productor por el pinganillo desde que esta mañana llegué con los periódicos a los estudios a las afueras de la ciudad. Es irremplazable, chaval, es irremplazable, pero tienes que reemplazarla. Entramos en 30 segundos. Yo no me había dado cuenta que detrás de mi solo hay un croma verde y no está esa pantalla gigante para ver imágenes ni está ella (es irremplazable, muchacho) ni está el cámara detrás de la cámara porque se los ha llevado embargados la vida (y son irremplazables, chaval).
Chaval, quedan 30 segundos, tú ahora sólo di lo que pone en el pronter y limítate a sonreir un poco, tampoco mucho que alomejor hay gente jodida en sus casas a las que no les apetece ver que estás feliz. Ya, chaval, ya se que no estás feliz pero eso a la gente le importa lo más mínimo, cabeza alta y a sonreir, hay que reemplazarla.
Buenas tardes. Se ha acabado la semana santa y la gente vuelve a sus casas (con una sonrisa), tenemos retenciones de varios kiómetros en las entradas de las grandes ciudades pero el estado del tráfico es (una gran sonrisa), mientras en el plano internacional hay miles de muertos (sonrientes) y terremotos, viento huracanado y una revuelta en el frenopático.
Si, eso debería haber dicho cuando el regidor dijo: tres, dos, uno, empieza chaval. Debería es un verbo que conlleva muchas cosas y no siempre las cumple y por eso cuando intenté hablar, lloré; y cuando intenté explicarlo cortaron y alegaron motivos técnicos y me chillaron desde el pinganillo: "Estas no son las noticias, chaval, aquí no vendemos un drama asi que deja tus lágrimas y presenta lo que te pone el pronter o invéntate algo que venda más, pero hazlo rápido"
Yo seguía con mi bloqueo y mi croma detrás y no sabía si era un médico de Anatomía de Grey o era algo importante de verdad y pensaba en ella y en reemplazar, importante, irremplazable, sonrisa, silencio, 30 segundos, chaval, reemplazar. Pensaba, craso error. Eso me dijo mi productor: pensaste, la cagaste. Y me cambiaron por otro cretino de corbata y acento marcadamente francés que repetiría semana tras semana las mismas frases sonrientes hasta el día en que se fuera su compañera de deportes.