Estimado pueblo de Zamora, dormido, tranquilo, apesadumbrado y taciturno. Gris al fin y al cabo. Pueblo de obreros valientes pero obedientes, de gentes con sueños lapidados. Zamoranos, zamoranas, gentes del Duero, de la lusitania vaccea, del extinto Reino de León, de la ciudad que no se ganó en una hora, de la muralla que no protege sino que corta las alas, de la ciudad del románico, de la ciudad tranquila del romancero, la bien cercada, la de Vellido Dolfos, ciudad de Victor Gallego, Doña Urraca, Viriato, Claudio Moyano, Santiago Alba Bonifaz, Diego de Losada, Arias Gonzalo, Diego de Deza, Pablo Morillo, Claudio Rodrigez, Ramón Abrantes, Ramón Álvarez, Dehly Tejero o Baltasar Lobo, ciudad, sí, ciudad.
Estimados zamoranos, silenciosos, callados, trabajadores, puede que tristes, grises, como vuestra ciudad. Estimados zamoranos, guerreros de Viriato, uníos, esta vez, sólo esta vez, unid vuestras manos, unid vuestras almas, vuestros corazones. Unid vuestras cabezas y vuestras fuerzas. pensad a la vez, pensad para bien. Estimado pueblo de zamora, hermanos de sangre, hermanos de corazón. Luchad por Zamora, luchad por Viriato, luchad por el Duero. Luchad porque nos devuelvan lo nuestro, luchad porque vuestros hijos tengan progreso.
Hoy, 30 de mayo, y aunque pase inadvertido para la mayoría de la gente, se cumplen 20 años de la que posiblemente sea la fecha más importante en la historia reciente de Zamora: La toma del cuartel. Hoy se cumplen 20 años del día, que toda la ciudad se puse de acuerdo para luchar por su ciudad. A las armas, camaradas.
El pueblo, unido como nunca
El Norte de Castilla
Jaionara, Baby (al que voy a copiarle la canción)